Antes de empezar un intercambio de negocios de este tipo, hay que conocer algunos factores y elementos que caracterizan la empresa (franquicia) con la que firmaremos el contrato. Y es que, a parte del negocio en sí, lo que nos interesará será la forma de gestión, así como el know-how. Y si estas componentes nos convencen, entonces habrá acuerdo entre las dos partes.

Y es que esto es la que llega a continuación y de nada sirve acabar en este punto sin haber tenido resuelto lo anterior, ya que el potencial franquiciado necesitará conocer dichos datos para tomar la decisión que le lleve a firmar y a estar de acuerdo con la cantidad solicitada en contraprestación. Esta será la relación económica entre ambos y la que une a los franquiciados con la matriz, la cual ha de responder con todo lo anterior para llevarse a cabo.

De manera que para la firma del contrato, ha tenido que existir la fase de cómo franquiciar un negocio y obedece a una realidad constatable en datos. En esto y en el contrato podrán ayudar, los cuales suelen conocer las bases típicas de los sectores más habituales para franquiciar.

Si el franquiciado reúne todo lo necesario para dar a conocer su deseo de firmar el contrato, tendrá que hacerlo mediante publicidad o acción comercial directa, lo cual lleva unos cauces al igual que cualquier otra empresa que utilice los más elementales preceptos del marketing tradicional y online.

En cuanto se acude a un consultor o asesor especializados en este sector, deberán apoyar al futuro franquiciado desde varios puntos de vista, pero sobre todo deberán ahondar en el concepto de central franquiciadora que pasará a ser el negocio prototipo. Pasará de ser un comercio de éxito a ser una red donde todos los asociados deben estar preparados para continuar con el mismo, ya que esta es la clave de la dinámica de estos business, por mucho que pueda estarse distorsionando como podemos observar en el mercado actual.

Al igual que pudo haberse hecho con el ejemplo prototipo o matriz del cual parte la clonación empresarial que de desea establecer, hay que volver a plantear un modelo de financiación incluyendo las previsiones de durada a un plazo de tiempo vista, como pueda ser 10 años. El plan, pues, también debe contemplar por tanto una sensibilidad financiera que prevea un horizonte de resultados, y donde ambas partes observen y analicen la andadura conjunta del proyecto.

Entonces cuando el empresario se plantea como como franquiciar un negocio, primero ha de estar consciente del nuevo panorama empresarial que presenta este plan expansivo. Y con la ayuda de buenos asesores en la materia, si los comienzos son positivos, seguirá en esa línea o deberá reajustar sus planes con cada experiencia.